- Estudiar los agujeros negros desde una perspectiva holográfica permite desarrollar herramientas que ayuden a comprender mejor algunos fenómenos que ocurren en el interior de estos objetos astrofísicos.
- La discusión entre físicos de diferentes áreas es crucial para descifrar efectos cuánticos que se producen en el interior de los agujeros negros y que aspiramos llegar a comprender en las próximas décadas.
Los agujeros negros son objetos astrofísicos muy masivos, tanto que ni siquiera la luz puede escapar de ellos. Tras décadas estudiando estos objetos –que sabemos que pueblan el centro de las galaxias, incluida la nuestra, y que incluso hemos fotografiado–, todavía existen muchos interrogantes. ¿Qué ocurre en el interior de los agujeros negros? ¿Qué pasa con la información cuando algo cae en su interior? ¿Se pueden usar los agujeros negros para aprender más sobre cómo funciona el universo? Para tratar de responder a estas preguntas, la propuesta de un gran grupo de investigadores a lo largo de varios países es aplicar la holografía como herramienta, eso sí, en el plano matemático: la holografía, en física teórica, sugiere que lo que ocurre dentro de un espacio puede estar codificado en su frontera, como un holograma.
Del 16 al 20 de junio, el Instituto de Física Teórica (IFT UAM-CSIC) organizó y acogió el congreso internacional New Insights in Black Hole Physics from Holography, un encuentro que reunió a 51 destacados investigadores para explorar los últimos avances en el estudio de agujeros negros desde la perspectiva de la holografía. En el encuentro, se trató de explorar fenómenos extremos asociados a los agujeros negros, desde su termodinámica cuántica hasta la reconstrucción de su interior. Estas investigaciones no solo buscan entender mejor estos objetos astrofísicos, sino también desentrañar aspectos fundamentales de gravedad cuántica: la gravedad conjugada con las escalas subatómicas, y que aún lo logramos comprender.

Según Juan Pedraza, investigador del IFT y organizador del congreso: “Actualmente estamos empujando las fronteras de este campo y queremos entender no solamente los agujeros negros clásicos, sino también fenómenos como la evaporación y efectos cuánticos en su termodinámica.” Pedraza subraya la importancia de crear puentes entre distintas líneas de investigación y fomentar nuevas colaboraciones, tanto a nivel nacional como internacional.
La conferencia contó con la participación de 15 ponentes invitados desde prestigiosas instituciones como Cambridge, Brown, Leiden, París o la Universidad de Texas. Entre ellos, Elias Kiritsis (APC Paris & Universidad de Creta) destacó el potencial del enfoque holográfico para comprender la teoría cuántica de campos, que describe muy bien las partículas y las fuerzas del universo… excepto la gravedad: “Esperamos que la correspondencia holográfica, que relaciona la física gravitacional con la teoría de cuántica de campos, nos permita entender cómo la teoría cuántica de campos se comporta en los contextos cosmológicos.”
Por su parte, Elena Cáceres (Universidad de Texas, Austin) aclaró que los modelos holográficos no representan agujeros negros reales del universo, sino construcciones en espacios matemáticos: “El conocimiento que obtenemos de esos modelos puede darnos herramientas para entender mejor los agujeros negros reales que sí observamos en el cosmos.”
Por su parte, Alice Bernamonti (Universidad de Florencia) valoró muy positivamente la experiencia: “Estoy disfrutando mucho de esta conferencia. Trata sobre agujeros negros y su conexión con la información cuántica, uno de mis principales intereses. Además, reúne una comunidad diversa de investigadores de toda Europa, lo cual es muy enriquecedor.”
Durante cinco días de charlas y discusiones, la comunidad científica espera que los avances compartidos en Madrid impulsen nuevas líneas de investigación y contribuyan a un objetivo más amplio: comprender mejor el tejido mismo del universo.